/ jueves 23 de noviembre de 2023

Llega al camposanto Adolfo Enríquez Vanderkam

Fue cerca de las 4:30 en que la carroza con el cuerpo del activista llegó a las inmediaciones del panteón

León, Gto.- Desde las 4:00 de la tarde, dos compañeros activistas acudieron a las inmediaciones del Panteón, con un gran letrero gritaban justicia ante el asesinato de Adolfo Enríquez Vanderkam, "Gobierno nefasto, pedimos justicia, no maten activistas", se leía en la pancarta.

Fue cerca de las 4:30 en que la carroza con el cuerpo del activista llegó a las inmediaciones del panteón escoltada por elementos de la Policía Municipal, los cuales se quedaron en los alrededores del cementerio, para resguardar la integridad de los presentes.

La marcha fúnebre incluso pasó por el lugar donde Adolfo o “Fofo” (como le decían sus amigos más cercanos), perdió la vida; una vez que el cuerpo del activista entró al camposanto, este fue recibido con aplausos, llanto y sobre todo muestras de cariño, por parte de seguidores, amigos y familiares.

"Viva Adolfo, viva Adolfo", "Justicia para Adolfo", "Se ve se siente Adolfo está presente", "Gracias, gracias Adolfo, gracias", fueron algunas de las frases que se gritaron durante el recorrido hacia la gaveta donde sus restos reposarán.

Lentamente el féretro fue llevado por los pasillos del panteón, esto mientras las lágrimas rodaban en las mejillas de sus familiares que sostenían en sus brazos una fotografía de Adolfo, así como ciudadanos que acompañaron a despedirse de Vanderkam.

Por algunos minutos el ataúd del activista se quedó en los pasillos a los pies de la gaveta donde descansarán sus restos, en ese momento María Arantxa Mayoagoitia Enríquez, sobrina del activista reposo sobre el féretro de madera. Su mano no dejó de tocarlo.

Poco antes de que el cuerpo del activista leonés fuera depositado en el panteón, la familia del activista llevó a su mascota, un can de nombre "Teo", el cual no se separó nunca de su dueño y lo acompañó hasta su última morada.

María Arantxa tomó a la mascota en sus brazos y lo acercó a su dueño, esto mientras le decía llorando: “despídete de papá, allí está papá”.

El dolor en los asistentes fue visible, ante la gran pérdida de un hombre que todo el tiempo estuvo para la sociedad leonesa, puesto que en los últimos años dedicó su vida a denunciar hechos delictivos en redes sociales y visibilizó las problemáticas en materia de seguridad que presenta la ciudad.

“Honor a quien honor merece”, grito a todo pulmón María Arantxa, mientras se colocaba la placa con su nombre.

Por último, la familia de Adolfo Enríquez Vanderkam, agradeció a todos los asistentes el acompañar al activista hasta su último adiós.

El lugar donde yacen los restos de Vanderkam, fue llenado de flores y muestras de cariño.

León, Gto.- Desde las 4:00 de la tarde, dos compañeros activistas acudieron a las inmediaciones del Panteón, con un gran letrero gritaban justicia ante el asesinato de Adolfo Enríquez Vanderkam, "Gobierno nefasto, pedimos justicia, no maten activistas", se leía en la pancarta.

Fue cerca de las 4:30 en que la carroza con el cuerpo del activista llegó a las inmediaciones del panteón escoltada por elementos de la Policía Municipal, los cuales se quedaron en los alrededores del cementerio, para resguardar la integridad de los presentes.

La marcha fúnebre incluso pasó por el lugar donde Adolfo o “Fofo” (como le decían sus amigos más cercanos), perdió la vida; una vez que el cuerpo del activista entró al camposanto, este fue recibido con aplausos, llanto y sobre todo muestras de cariño, por parte de seguidores, amigos y familiares.

"Viva Adolfo, viva Adolfo", "Justicia para Adolfo", "Se ve se siente Adolfo está presente", "Gracias, gracias Adolfo, gracias", fueron algunas de las frases que se gritaron durante el recorrido hacia la gaveta donde sus restos reposarán.

Lentamente el féretro fue llevado por los pasillos del panteón, esto mientras las lágrimas rodaban en las mejillas de sus familiares que sostenían en sus brazos una fotografía de Adolfo, así como ciudadanos que acompañaron a despedirse de Vanderkam.

Por algunos minutos el ataúd del activista se quedó en los pasillos a los pies de la gaveta donde descansarán sus restos, en ese momento María Arantxa Mayoagoitia Enríquez, sobrina del activista reposo sobre el féretro de madera. Su mano no dejó de tocarlo.

Poco antes de que el cuerpo del activista leonés fuera depositado en el panteón, la familia del activista llevó a su mascota, un can de nombre "Teo", el cual no se separó nunca de su dueño y lo acompañó hasta su última morada.

María Arantxa tomó a la mascota en sus brazos y lo acercó a su dueño, esto mientras le decía llorando: “despídete de papá, allí está papá”.

El dolor en los asistentes fue visible, ante la gran pérdida de un hombre que todo el tiempo estuvo para la sociedad leonesa, puesto que en los últimos años dedicó su vida a denunciar hechos delictivos en redes sociales y visibilizó las problemáticas en materia de seguridad que presenta la ciudad.

“Honor a quien honor merece”, grito a todo pulmón María Arantxa, mientras se colocaba la placa con su nombre.

Por último, la familia de Adolfo Enríquez Vanderkam, agradeció a todos los asistentes el acompañar al activista hasta su último adiós.

El lugar donde yacen los restos de Vanderkam, fue llenado de flores y muestras de cariño.

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