Las concesionarias del transporte público suburbano temen regresar a un semáforo rojo, esto luego de que el Secretario de Salud anunciará que las estadísticas de contagios por Covid- 19 en el estado siguen incrementado, lo que lleva a Guanajuato a posicionarse al límite del semáforo naranja.
Los prestadores de servicio señalaron que, debido a la ausencia de estudiantes de los niveles básicos, media superior y superior, sus ingresos se mantienen bajos, sin embargo, regresar al semáforo rojo implicaría tener menos pasaje y por ende los perjudicaría.
Fernando Saavedra, operador de Transporte Salmantino, señaló que durante el semáforo naranja han trabajado al 50% de aforo al interior de la unidad, reconoció que la mayoría de los ingresos que perciben actualmente se debe a personas de comunidades como Valtierrilla que se dedican al comercio en esta ciudad y a los trabajadores que acuden a las empresas.
“Si se llegan a cerrar negocios o a confinar a la gente, el servicio bajaría mucho y eso provocaría que las corridas de camiones vuelvan a recortarse, así como también el tiempo de espera para los usuarios”, explicó.
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Arturo López, quien es conductor del transporte de la Comunidad de la Ordeña, indicó que la concesionaria actualmente se encuentra trabajando con las siete unidades móviles y aunque sus ingresos han incrementado hasta un 50% las indicaciones siguen siendo las mismas, permitiendo el acceso al autobús únicamente con cubrebocas.
Pese al incremento en los casos de covid- 19 en esta localidad, la Dirección de Movilidad, Transporte y Vialidad informó que en semáforo naranja la movilidad vehicular permanece en un 80% y se continúan con aforo restringido no mayor al 50%.
Además, se realizan en coordinación con los operadores de transporte acciones de desinfección y sanitización de los vehículos al inicio y termino de cada corrida.