Tras ocho días de la emanación de la nube amarilla y humo negro de la Refinería Ingeniero Antonio M. Amor (RIAMA), trabajadores de Petróleos Mexicanos confirmaron que el agente presente en la nube de gas emanada es un catalizador cancerígeno, utilizado en la planta Catalítica en la producción de gasolina.
De acuerdo a los trabajadores, este tipo de incidentes puede registrarse por un error humano ante una mala calibración o la falla de los componentes ante las altas presiones y temperaturas que se registran en el proceso de transformar el petróleo crudo en gasolina; mismo que comienza con el ingreso del petróleo en un horno para fraccionar los distintos componentes según su ebullición.
Posteriormente se hace una nueva destilación al vacío, que termina de separar la nafta, el gasoil, el fueloil, el combustible para aviones y los distintos gases. El residuo más pesado pasa luego por un catalizador que rompe el gasoil en productos más livianos para reutilizarlos y sacarles más valor económico.
“Es un proceso de transformación de la materia muy completo y complejo, en el que estamos refinando el combustible, para lo cual es requerido un método químico que conlleva agentes altamente contaminantes y que si bien se trabajan dentro de las normas, la exposición prologada en grandes cantidades si es perjudicial para la salud, no hacemos galletas en la refinería, hacemos combustibles y todos los procesos, preventivos o correctivos requieren purgar líneas que si no se hace puede haber un accidente muy grave”, explicó José Luis N.
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Así mismo, en Salamanca se encuentran en funcionamiento 126 empresas e industrias de jurisdicción federal, además de ladrilleras y un parque vehicular superior a los 80 mil vehículos que generan algún tipo de emisión a la atmosfera, debido a ello, el Sistema de Monitoreo de la Calidad del Aire del Estado de Guanajuato ha activado cuatro fases de precontingencia este 2022, tres por Dióxido de Azufre (SO2) y una PM10.
Afectaciones a la salud
Las diferentes asociaciones ambientalistas en el municipio han concordado en que debido a ello, las enfermedades asociadas a los altos niveles de contaminación en el aire y agua por pasivos ambientales pueden derivar en cáncer o leucemia, así como enfermedades respiratorias agudas, enfermedades del aparato digestivo y demás padecimientos, incluso de tipo neurológico que inciden en el aprendizaje, entre otras afectaciones a la salud causadas por el contacto con sustancias altamente tóxicas como los organoclorados y organofosforados.
Exigencia ciudadana
Por más de dos décadas los salmantinos han tenido que lidiar con teas relacionados a pasivos ambientales, desde Tekchem, el tiradero de lodos tóxicos en el cerro de la Cruz, las descargas de combustible y demás contaminantes al rio Lerma y al Temascatío por el parque industrial, así como las emisiones a la atmosfera, urgen a las autoridades gubernamentales y ambientales a dar celeridad al tema.