La contaminación en Salamanca es un problema complejo que se viene arrastrando desde hace años. Con el Plan Salamanca se buscó trabajar a favor del medio ambiente coordinando el trabajo entre autoridades federales, estatales, municipales.
Entre las acciones que contempla este plan se incluye prevenir la contaminación del Río Lerma mediante la reducción de descargas de origen industrial así como el Saneamiento del acuífero.
En este contexto el presidente de la Asociación Ambiental Valle del Lerma Miguel Ángel Granados Baeza enfatizó que la falta de voluntad por parte de los gobiernos estatales y federales para solventar la problemática ambiental ha hecho que este problema que tiene Salamanca vaya creciendo cada día más.
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“Necesitamos ser exigentes de parte de la ciudadanía para que gobiernos estatales, federales y municipales atiendan la contaminación de l municipio. El saneamiento del rio Lerma no es tan sencillo porque es una entidad federal y requiere de la participación federal, pero el estatal y el municipal puede trabajar con ciertas acciones” explicó
Informó que desde hace cinco años el entonces presidente municipal Justino Arraiga Rojas hizo la solicitud para que la Conagua le diera la facultad al municipio de atender este acuerpo de agua y así estuviese en buenas condiciones pero a la fecha estas acciones permanecen dormidas.
“El Río Lerma, no solo genera mosquitos tiene malos olores por que las aguas traen ácidos y metales pesados. Estas aguas las utilizan los agricultores y afectan por que vuelven la tierra fértil y no va dar frutos, sin mencionar las reacciones toxicas que le genera al organismo” señaló.
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Por lo que consideró como primordial la comunicación entre las entidades gubernamentales para que se le de continuidad a los planes y proyectos que existen en materia ambiental y atender no solo al Lerma, también al Río Temascatío que se encuentra en el olvido.
