Guanajuato, Gto. (OEM).- La agrupación francesa Mystica Salvaje-La Salamandre, se presentó en la 51 edición del Festival Internacional Cervantino (FIC) con una historia silenciosa tejida por música y luz; una puesta que juega en la frontera entre el performance y el ritual.
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Entre las penumbras de la noche en el último sábado de la también llamada Fiesta del Espiritu decenas de personas disfrutaron del espectáculo que la compañía francesa brindó, utilizando el lenguaje universal del cuerpo y las emociones.
Inspirada en cuentos, ritos y celebraciones de todo el mundo, destaca la relación simbólica y metafórica del hombre y los elementos.
El escenario fue la plazuela Miguel Hidalgo o mejor conocida como 'Las ranas', donde el espectáculo que logró involucrar a los ahi presentes en un cuento atemporal que lleva al viaje de la mano de Hestia, la diosa griega del fuego sagrado.
El fuego que simboliza el ancla, el hogar, la base desde la cual uno puede brillar en el mundo, fue uno de los elementos principales en la apuesta escénica en la noche previo al termino del Cervantino.
En estos tiempos donde los aspectos masculino y femenino del mundo están luchando por el equilibrio que deseamos, celebramos la fuerza y la generosidad del ser humano que surge cuando entra en contacto con su “lado femenino”, la profundidad de su propio ser, la luz y su capacidad de mantener allí una llama cariñosa.
Nació del deseo de acercarse a las raíces de la danza y el teatro, inspirado en los aspectos sociales y terapéuticos del arte, Wild Mystica resalta las conexiones entre la humanidad y el misterio de la vida, al utilizar la dimensión simbólica de los gestos y elementos naturales para tocar el inconsciente, también, la expresión artística para transmitir un mensaje de alegría.
Mística Salvaje trabaja para encontrar en sus creaciones los principios originales del arte sacro para resistir con la poesía un pensamiento normativo y mortal, al servicio de un arte que ilumina, nutre y conecta: "al servicio de los humanos, al servicio de la Tierra, al servicio de la vida".
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Con dicha puesta, la compañia francesa realizó dos de sus tres presentaciones programadas dentro del Cervantino que este domingo 29 de octubre concluye la edición 51 y que tuvo a Estados Unidos y Sonora como invitados de honor.