En el marco del 84 aniversario de la Expropiación Petrolera, dirigentes de la Sección 24 del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana, autoridades municipales y militares, rendirán homenaje a la memoria de Lázaro Cárdenas del Río, militar y político que el 18 de marzo de 1938 rescató para la nación el recurso que ha sido la base del desarrollo del México moderno; tras dos años en que se suspendieron los actos cívicos por la contingencia sanitaria.
De esta manera se celebra que este acto de nacionalización de la industria petrolera, tras la de ejecución de la Ley de Expropiación del año de 1936 y del artículo 27 de la Constitución Mexicana a las compañías que explotaban estos recursos, maquinaria, instalaciones, edificios, refinerías, estaciones de distribución, embarcaciones y oleoductos, mediante el decreto anunciado el 18 de marzo de 1938, por el presidente Lázaro Cárdenas del Río.
➡ Ni un solo peso han destinado a Riama
Previo a la expropiación, la función principal de las compañías petroleras en México consistía en exportar el mayor volumen de petróleo crudo y sus derivados al extranjero, por lo que el mercado nacional estaba desatendido a tal grado que todavía en 1938 las industrias establecidas en los estados de Jalisco y Michoacán usaban leña como fuente de energía, debido al poco interés que las tres refinerías existentes tenían en surtir tales mercados.
Salamanca antes y después de la refinería
La llegada de la Refinería Ingeniero Antonio M. Amor (RIAMA), hace casi 72 años marcó el parteaguas en la transformación de la ciudad provinciana a la Salamanca industrial, además de la fusión de diversas costumbres a la llegada de trabajadores de diversos estados de la república, para alcanzar un progreso comercial, económico y social.
“Previo a 1943, año en que se adquirieron los terrenos para la refinería; Salamanca era una ciudad agrícola, con una población de 20 mil habitantes que trabajaban en fabricas de embutidos, como jornaleros, textileros y la cerámica u otras actividades que ofrecían sueldos inferiores a los que percibirían los petroleros, lo que ocasionó choques de antagonismo en el ambiente provinciano ajeno al tumulto del desarrollo industrial que estaba a punto de iniciar, además de un intercambio cultural con la llegada de personas de los estados de Veracruz, Tamaulipas, Querétaro, Michoacán y Jalisco, así como del Distrito Federal”, describió Juan José Rodríguez Chávez Cronista de la Ciudad.
Posteriormente, en 1950 con la terminación del tendido del oleoducto procedente de Poza Rica, Veracruz hasta Salamanca, se pusieron en operación las primeras unidades de producción, integradas por una planta de Destilación Primaria, con capacidad de procesamiento de 25 mil barriles por día.
En la actualidad
Con 45 plantas y una plantilla laboran de cuatro mil 800 personas, la RIAMA produce a diario alrededor de 220 mil barriles de petróleo, 54 mil de gasolina y el diesel, 12 mil de asfalto, entre otros refinados que encuentran su principal mercado en los estados de Aguascalientes, Colima, Durango, Jalisco, Michoacán, Nayarit, San Luis Potosí y Zacatecas.
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