Ante la generalización en los hogares del servicio de Internet, los cibercafés están a punto de desaparecer y los propietarios están considerando cambiar de giro.

Alan Solano, propietario de uno de estos centros de información, indicó que a dos meses de la nueva normalidad, han trabajado aún 30% de sus ingresos, pues la mayoría de sus ventas las percibían de los trámites y los trabajos que imprimían los estudiantes.

Dijo, que las clases virtuales en lugar de beneficiarles, han demostrado que los negocios de internet están muy obsoletos, esto debió a que la mayoría de las personas cuenta ya con los servicios de internet o bien con algún equipo tecnológico en casa.

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“Es poca la gente que viene(…), durante el cierre de todos los negocios también nos vimos afectados ya que si no había estudiantes, la gente que venía a imprimir o realizar algún requisito era el único sustento”, explicó.

Además, señaló que durante el primer cierre de negocio estuvo pagando a sus empleados la mitad de su sueldo.

También indicó, que ante la falta de estudiantes por la pandemia del Covid-19, ha tenido que recurrir al recorte de tiempo laborado, pues anteriormente cerraba a las 9 de la noche y ahora lo hace hasta las 4 de la tarde, laborando únicamente de lunes a sábado, cerrando ahora el día domingo.