América está a la altura de las mejores plantillas del torneo. El guardameta de las Águilas, Agustín Marchesín, advirtió que para esta temporada su equipo está al nivel de los más caros y efectivos como en el caso de Tigres, Monterrey y Pachuca.

“Hay muchos jugadores seleccionados. Es el equipo más grande de México, así que tiene por obligación que estar en esa categoría”, dijo el cancerbero.

Con cuatro victorias en lo que va del torneo, el argentino explicó que el conjunto azulcrema tiene la capacidad de pelear por el título, pero reconoció que le gusta la idea de no ser considerados como favoritos.

“Tenemos un plantel para lograr el objetivo que es lo que queremos. Ojalá que no nos pongan como candidatos para poder dar la sorpresa”, reconoció “Marche”.

Enfrentar a Veracruz es una buena oportunidad para recortar distancia con Rayados por el liderato del torneo. De combinarse una victoria sobre los escualos y una derrota de los regiomontanos frente a Necaxa, las Águilas se pondrían a un punto.

“Ojalá que podamos ganar para seguir sumando puntos para buscar la clasificación tan ansiada. Sería muy importante aprovechar la localia, sumar los puntos que sean de local porque sabemos del peso que tiene la gente para nosotros y cada fin de semana se hace sentir. Creo que con nuestra afición nos tenemos que hacer respetar”,

Agustín y Menéndez, a migos y rivales

La amistad va más allá de una posición, de un equipo de futbol o de una nacionalidad.

Los compañeros del barrio y esos que acompañan en un debut dejan una huella permanente en la carrera de todo futbolista, pero en la cancha a veces eso se olvida.

El destino unió a Agustín Marchesín y Cristian Menéndez en el Lanús de Argentina. Compartieron el vestidor durante dos años y medio en posiciones contrarias: uno portero y el otro delantero, pero sus carreras los llevaron por rumbos distintos. Marchesín salió del Granate y viajó a México para firmar con Santos Laguna; Cristian se dirigió a Ecuador con el Emelec.

Hoy se enfrentan defendiendo camisetas distintas. Uno es águila, el otro tiburón.

 “Hace rato que no hemos hablado, pero seguramente cuando inicie el partido nos saludaremos. Tengo una gran relación con él. Sabemos de la peligrosidad que puede llegar tener, así que hay que estar atentos para que no nos anote”, dijo Marchesín sobre su colega.

Visitar el estadio Azteca es una experiencia que el “Polaco” sueña con vivir; es un inmueble histórico, particularmente para la Selección Argentina, por eso quiere marcar en su primer partido contra los azulcremas, pero enfrente tendrá a su ex compañero, que lo conoce muy bien y querrá arruinar esa celebración.

-¿Si te mete gol?

“Lo saco corriendo. Espero que no”, bromeó el guardameta.

La confianza que existe entre ambos es grande; Marchesín fue quien aconsejó a Menéndez venir a jugar a México.