Con el regreso a la normalidad y el retorno a los eventos masivos; las tradicionales “posadas navideñas” se vuelve muy significativa, sobre todo para las dulcerías que tras dos años se enfrentaron a una fuerte crisis por las restricciones generadas por la pandemia, no obstante, los primeros 16 días del mes de diciembre, ya ha resultado benéfico para el sector, que comienza a registrar un importante repunte.
Raúl López Muñoz, vendedor de una dulcería, indicó que pese al incremento del 30% en el precio del dulce, la ciudadanía no ha dejado de consumir y la compra se ha mantenido constante desde que comenzó el mes de diciembre, esto en relación al 2022.
“Estamos en una etapa importante para los empresarios que se dedican al comercio, porque la gente durante esta temporada tiene ingresos mayores y tiene la oportunidad de gastarlos, además de que particularmente en este 2022, la gente tiene mayor posibilidad de festejar un poquito más que en años pasados y eso genera un ambiente de positivismo y quieren reunirse en cantidades mayores, hacen que el flujo de asistencia sea más grande en comparación a años anteriores”, explico.
El retorno a las celebraciones navideñas, ha generado que la ciudadanía busque las mejores alternativas para que no dañar su economía y por ello, han optado por la compra de dulce a granel que se oferta en 60 pesos el kilo, seguido de paletas de tamarindo, las famosas cachetadas y las bolsitas de frituras, con la finalidad de generar una piñata más variada.
En el caso de las piñatas, las hay de diferentes tamaños y formas, que pueden ofertarse desde 70 a 600 pesos, las más económicas.
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Debido a la buena respuesta que se ha generado desde finales del mes de noviembre, las dulcerías prevén un excelente cierre de año, pues aseguran que la compra de dulces y piñatas para la temporada se seguirán consumiendo por lo menos hasta el 31 de diciembre, donde las familias y amigos despiden en unidad el año.