Como cada 29 de de septiembre, la iglesia católica celebró a los Santos Arcángeles Miguel, Rafael y Gabriel. Tradición que aún conservan algunas familias de la ciudad, celebrando principalmente a San Miguel Arcángel.
Los nombres de estos arcángeles han quedado grabados entre la comunidad cristiana, gracias a que aparecen en las Sagradas Escrituras, pues llevaron a cabo misiones importantes encomendadas por Dios.
Elvia Jiménez, devota de San Miguel Arcángel, señaló que uno de los festejos más representativos para este santo se realizaba en la colonia Guanajuato, donde los rezos, la música, pirotecnia y la verbena popular eran parte del festejo.
El día 29 de septiembre se acostumbraba llevar a la imagen de San Miguel en peregrinación hasta el Señor del Hospital, donde se le oficiaba una misa para luego comenzar con el festejo popular.
Según las creencias populares, en la madrugada del 29 de septiembre la puerta del infierno queda sin vigilantes, pues a San Miguel, que es el guardián de ésta, se le da un día descanso por su santo.
Así que el demonio puede hacer de las suyas. Según la tradición, la noche del 28 de septiembre hay que poner una cruz de flores en las puertas de las casas para protegerse del demonio y evitar que entre y haga maldades.
