Diqui James asegura que el arte debe ser un salto al vacío

Diqui James, director artístico de la compañía teatral Fuerza Bruta asegura que el arte debe ser un salto al vacío; traen a México el espectáculo “Ave”

Kevin Aragón / El Sol de México

  · miércoles 17 de abril de 2024

Diqui James, director artístico traen a México el espectáculo “Ave” FOTO:

Cuando la compañía Fuerza Bruta inició en 2005, no se confiaba en una propuesta escénica con acrobacias, fantásticas escenografías y un uso total del espacio. Diecinueve años después son una de las agrupaciones teatrales más aclamadas por la revolución que significa su trabajo para el arte histriónico.

“Siempre quisimos hacer un lenguaje que atravesara esa barrera de que el arte y los espectáculos son para cultos y preparados. No nos importaba si habías leído un libro o si tenías 10 años o 70, o si te gustaba el rock o la cumbia. Lo que buscábamos era el espíritu del carnaval, del teatro callejero, donde te diriges a todos y no hay diferencias sociales”, relata Diqui James, director y fundador de Fuerza Bruta, en entrevista virtual con El Sol de México.

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“Creo que el buscar ese lenguaje fue lo que, de repente, nos permitió darnos cuenta que podíamos viajar a cualquier parte del mundo y atravesar barreras culturales. Es que no importa dónde nos presentemos, cuando comienza el show no hay diferencias, es algo increíble”, agrega el artista, quien en junio se presentará junto a su compañía en las instalaciones del Frontón México.

SALTO AL VACÍO

Así, “contra todas las reglas”, del mercado y de las convenciones teatrales, con más de cinco mil 800 presentaciones en 34 países, la compañía supo asumir los riesgos de sus propuestas y se encuentra en la búsqueda de nuevas formas de expresarse, pues, como lo piensa Diqui —con una sonrisa desde la pantalla pues se encuentra en Buenos Aires— todo acto artístico tiene la palabra “riesgo” incrustada en su médula.

“Para mí cualquier hecho artístico conlleva un gran riesgo, porque debe ser un salto al vacío. Cuando un ingeniero está probando un freno y le funciona, pues no tiene porque usar otro, pero en el arte no existe eso. ¿Quién puede decirte que algo es bueno o malo, mejor o peor? Depende de la emoción que generes en el público.

“Ningún artista puede ir sobre terreno firme, porque esto no es ingeniería, muchas veces son puras emociones. Ensayando el show nuevo, “Ave”, nos dijimos ‘vamos a hacer el espectáculo más feliz del mundo, el más feliz que podamos hacer, dejando toda la oscuridad’, nos ha costado dejar de hacer lo que ya nos funciona. Pero ese riesgo, que es insoportable, también es necesario para crear, sino no estás haciendo nada”, cuenta el director, mientras con las manos parece que va coordinando el vuelo de sus ideas.

Diqui James, director artístico traen a México el espectáculo “Ave” FOTO:

ASOMBRO POR LA NATURALEZA

Sobre el espectáculo “Ave”, Diqui James comenta que el nombre surgió de la abreviatura de la palabra “aventura” en español; y de que en inglés se asocia con la palabra “heaven”, que significa “paraíso”. Es decir “la aventura del paraíso”, una puesta en escena que evoca a través de “escenografías que son máquinas que generan acción”, una loa a la naturaleza y la impresión que deja su contemplación”.

“Si te paras frente a una tormenta frente al océano, lo que se siente ahí es eterno. Es algo que sintieron los primeros homo sapiens y que compartimos hasta ahora. En el show recreamos un ambiente natural, pero que se nota que es artificial, pues no queremos emularla, pero sí queremos que todos vayamos a ese lugar, siempre buscando la emoción”, adelanta el director, quien se dice entusiasmado de regresar a México, por la entrega del público que responde con creces lo que su compañía realiza en el escenario.

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En cuanto al origen de esta puesta en escena, que busca ser “la más feliz” que haya representado Fuerza Bruta, Diqui menciona que surgió como una necesidad de respuesta ante la violencia del mundo un tanto difícil de explicar, pues pudieron hacer la “obra más violenta y molesta del mundo”, pero no fue así.

“Por más que países como los nuestros, México o Argentina, tengamos 80 mil millones de problemas, nadie nos puede quitar las fiestas ni el sentarnos con los amigos a tomar tequila o cerveza. Los países latinoamericanos tenemos por naturaleza la cultura de la celebración. Eso es lo que queremos compartir, aunque sea una locura, pero que tenga que ver con algo positivo, y que la gente sienta que la felicidad en verdad existe”, finaliza.