Luego de los trabajos de rehabilitación de banquetas en la zona centro, José Luis Justo Rojas, un ciudadano que padece discapacidad motriz, denunció la obstrucción de espacios destinados para personas con discapacidad con materiales para construcción, por lo que hizo un llamado a las autoridades y a los ciudadanos para tener empatía y respeto a los espacios destinados para ellos.
Después de las peticiones hechas por ciudadanos para reparar las banquetas ubicadas en la calle Tomasa Esteves, éstas fueron reparadas hace algunos días, sin embargo, luego de los trabajos realizados, montículos de materiales fueron dejados en un cajón de estacionamiento destinado para personas con alguna discapacidad.
En este sentido, José Luis Justo Rojas señaló que aunque recibieron apoyo de la anterior administración con la señalización de cerca de 20 espacios destinados para ellos y a pesar de que han recibido apoyo de la actual administración, resulta necesario cumplir con espacios exclusivos.
Y aunque se señalaron más de los que ya se tenían, sobre todo en la zona centro, lo que representó un gran avance en el tema de la inclusión, sigue haciendo falta cultura y respeto a los reglamentos.
“Necesitamos de estos espacios, que nos permite a las personas que tenemos diferentes discapacidades acercarnos más y hacer nuestra vida cotidiana en la zona centro de una manera más cómoda. Yo creo que nos hace falta cultura, hago un llamado a las autoridades para que nos ayuden a mejorar, también aprovecho para pedir a los representantes del municipio que nos den preferencia a las personas que portamos placas con discapacidad, porque hoy en día cualquier persona puede ir a comprar una calcomanía con el logo de discapacidad y hacer uso de esos cajones . Yo no dudo que algunos tengan la necesidad, pero debemos recordar que tenemos un reglamento de tránsito y que tenemos que respetar”, señaló.
Hizo un exhorto a las autoridades a que los sigan apoyando y solicitó la delimitación de un cajón que se encuentra ubicado en la calle Matamoros casi esquina con Zaragoza; ya que si cuenta con señalética, pero no está delimitado con la franja amarilla y es común que los automovilistas invadan y dejen un espacio muy pequeño para estacionarse.
Se estima que en este municipio existen más de 14 mil personas discapacitadas, y un alto porcentaje de ellas se enfrentan a problemas de acceso ante la existencia de múltiples barreras arquitectónicas que se generaron por una planificación urbana deficiente en administraciones pasadas y por la falta de cultura de parte de la sociedad.