Un 27 de septiembre pero de 1921 se inauguró el jardín Miguel Hidalgo (mejor conocido como Jardín San Antonio), para conmemorar el Centenario de la Consumación de la Independencia de México.
En Salamanca el 27 de septiembre de 1821 también se celebró la culminación de la Guerra de Independencia. Por una orden girada a la intendencia de Guanajuato por el emperador Agustín de Iturbide, los festejos duraron cuatro días y principalmente el 27 de septiembre de 1821, día en que se firmó el Juramento y Acta de la Promulgación y Consumación de la Independencia Nacional en la Ciudad de México.
Juan José Rodríguez Chávez, cronista de la ciudad, detalló que para estos festejos se adornaron ventanales y puertas con listones y papelillos de colores verde, blanco y rojo; se celebraron tedeums en la hoy Parroquia Antigua y otras iglesias de la ciudad como acción de gracias a Dios por ver consumada la Independencia de México.
“También se realizaron veladas literarias, corridas de toros, musicales y otros eventos populares, palo encebado, quema de fuegos pirotécnicos y una verbena popular; estos festejos culminaron el 27 de septiembre de 1821 cuando las autoridades de gobierno encabezadas por el alcalde salmantino Vicente García de León, miembros de la iglesia y gente pudiente de la ciudad subieron al estrado y lanzaron monedas de plata y oro al pueblo”, dijo.
Cien años después, el 27 de septiembre de 1921 siendo presidente municipal, Edmundo Domensain Freyre, se inauguró el jardín Miguel Hidalgo (Hoy conocido como Jardín San Antonio) esto para conmemorar el Centenario de la Consumación.
Para identificar el nombre del jardín con el personaje, se colocaron árboles de ornato de Laurel de la India. Al centro del jardín se ubicó una fuente de cantera y al centro se armó una columna y en la cima se colocó el busto en bronce del Padre de la Patria, Miguel Hidalgo y Costilla.
Décadas después demolieron las tres bardas perimetrales con las que contaba el jardín, se cambió la fisonomía del jardín y se retiró la fuente, pero quedó vigente la columna, aunque perdió su fisonomía original y lo convirtieron en un pilar cuadrado con el busto de Hidalgo en lo alto, sin embargo con el paso de los años el busto de Miguel Hidalgo fue robado del Jardín y se desconoce su paradero.