Aunque el sector educativo ha implementado cursos de lenguaje de señas para los docentes con la finalidad de facilitar la inclusión en el sistema educativo, lo ideal sería convertir al lenguaje de señas en una materia básica en el nivel educativo, de esta manera se podría ayudar a las personas con Discapacidad para que cuenten con una mejor formación académica, así lo manifestó, Sofía Araceli Martínez Espino, responsable de Comunicación Social de la Asociación de Sordos Impulsores de Salamanca.
Martínez Espino, señaló los cursos de lenguajes de señas que otorga la Secretaría de Educación Pública son buenos, no han sido suficientes para generar el interés de un mayor número de maestros impulsar la Educación a los sectores más vulnerables.
"Debería ser primordial constituir el lenguaje de señas como una materia obligatoria en la educación básica, ha habido cursos para profesores, pero son pocos los que se animan, si se tuviera una mayor respuesta, será importante ya que permitiría ayudar a los niños y niñas que padecen alguna discapacidad auditiva, visual y que dificulta su capacidad para comunicarse", explicó.
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Aseguró, también que la propuesta para integrar el lenguaje de señas en la educación básica, es un tema que no ha pasado desapercibido en los foros realizados por la Secretaría de Educación a fin de que se integre con mayor facilidad en la educación básica.
En Salamanca, existen 14 mil personas con alguna discapacidad, de las cuales más de cinco mil padecen problemas visuales y más de dos mil registran alguna discapacidad visual, en ambos casos la población que más presenta estás vulnerabilidades son las personas de 60 años en adelante.
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La Lengua de Señas Mexicana (LSM), es la lengua que utilizan las personas sordas en México. Como toda lengua, posee su propia sintaxis, gramática y léxico y se compone de signos visuales con estructura lingüística propia, con la cual se identifican y expresan las personas sordas en México.