A pesar del clima de inseguridad y el impacto social de los homicidios dolosos, tanto a nivel nacional como en tierras salmantinas, habitantes de las comunidades Labor de Valtierra y Valtierra esperan este año la llegada de más de cinco mil connacionales que trabajan en el extranjero, pasar la temporada de fin año en compañía de sus familias en sus comunidades de origen.
Al respecto, familiares de migrantes salmantinos concordaron en que la inseguridad que se vive en el municipio no será impedimento para la llegada de los connacionales, a pesar de que el año pasado disminuyó el número de visitantes, ahora se espera el arribo de más de cinco mil al menos en la localidad.
“Eso no los desanima lo que quieren es ver a la familia, además estás comunidades todavía están tranquilas, ellos quieren pasar el tiempo con sus familias, no vienen a hacer desmanes ni nada, esperemos que todo esté tranquilo y no se desanimen a regresar”, indicó Pedro Orozco.
Así como las familias de estas dos comunidades salmantinas esperan con ansia el regreso de los suyos, para las celebraciones de fin de año. Alrededor del 80% de los habitantes tanto de Labor de Valtierra y Valtierra laboran de manera legal en Houston, Texas de la unión americana, por lo que tienen la oportunidad año con año regresar a su comunidad de origen a visitar a sus familias.
En la comunidad de Valtierra se espera el arribo de más de 30 familias que tienen radicando en la unión americana más de 25 años; “como tienen papeles algunos vienen en avión otros en caravana, de mis allegados y conocidos son cuatro familias las que esperamos este año y que empezarán a llegar esta semana”, agregó.
De acuerdo a los habitantes de ambas comunidades, durante el último bimestre de cada año el regreso de los connacionales representa una temporada de alegría, que dota de vida las calles de los poblados; “le da más vida a la comunidad, hasta mi mamá dice que se marea de ver a tantas camionetas dando vueltas, también nos va mejor a los comercios”, manifestó María Aguilera.
La mayoría de los migrantes provienen de Houston, Texas, aunque también hay quienes residen en California y Carolina del Norte, “es que la mayoría de los muchachos nada más crecen y se van, apenas si terminan la secundaria o la preparatoria y se van con las familias que tienen allá, yo creo que de estas dos comunidades no hay una sola familia que no tenga un pariente en el norte”, concluyó.