La destitución de Contralor Municipal, Miguel Enrique Cordero Saucedo fue apegada a derecho y se continuará con las acciones jurídicas correspondientes en su contra, en materia administrativa y penal, advirtió el síndico José Luis Montoya Vargas.
Al término de la sesión ordinaria de Ayuntamiento, en la que fue designado un encargado de despacho de Contraloria, Montoya Vargas se dijo respetuoso, pero no compartir la opinión de la diputada Libia Denisse García Muñoz Ledo, quien habría señalado que se amedrentó y amenazó “a (Miguel Enrique Cordero Saucedo) quien realiza su trabajo”.
Aclaró el síndico que el mismo fue quien solicitó la destitución de Cordero Saucedo por irregularidades en el manejo de la Contraloría Municipal ya que no estaba cumpliendo con sus funciones que le prescribe la Ley Orgánica Municpal y el Reglemento.
En el nombramiento del encargado del despacho, Ernesto Fiscal Agüello, observó el síndico que todo el procedimiento fue legal, aunque reconoció que se sustentó en analogía, que es un principio de interpretación del derecho, al tener la Ley Orgánica Municipal “lagunas” que deberían resolver los legisladores.
Expresó que las causales de la deposición del Contralor Municipal fueron por ventilar asuntos reservados de la Contraloría la opinión pública y “ausentarse de sus labores de manera injustificada. Tal parecía que se mandaba sólo”.
No existió en su destitución, insistió, ”abuso de poder” ya que fue dispuesto por mayoría de los integrantes del Ayuntamiento posturas sin embardo apegado ley y reglamento legalidad.
“Los contralores no son un cuarto poder” remató el síndico del Ayuntamiento, José Luis Montoya Vargas.