Enrique Díaz Díaz, obispo de la Diócesis de Irapuato, comentó que si bien México sigue teniendo muestras de ser un país machista, en la actualidad es tiempo de confiar en las personas e hizo hincapié en la urgencia de reconocer y valorar a las personas por su capacidad de resolución a los problemas que presenta México y no por su género.

La situación de las mujeres en México es alarmante, según estadísticas aproximadamente 10 mujeres desaparecen cada día, lo que refleja la gravedad de la violencia de género en el país; esta violencia no solo se manifiesta en forma de desapariciones, sino también en agresiones físicas, abusos sexuales y discriminación sistemática en diferentes aspectos de la vida cotidiana. En un país donde las mujeres enfrentan múltiples obstáculos y peligros debido a su género, es fundamental cambiar la mentalidad y brindar igualdad de oportunidades para todos.

“Yo creo que es tiempo de no quitar valor a la persona siendo hombre o siendo mujer, yo creo que son las mejores personas, con los mejores programas y con la mejor preparación para poder responder a los problemas gravísimos que tiene nuestra patria, nuestro Estado y nuestra ciudad, no podemos decir que un hombre o una mujer es mejor por el simple hecho de serlo, ya basta de discriminar en este sentido, hay que darle oportunidad a la persona por lo que es, por su dignidad de persona”.

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El Obispo Enrique Díaz Díaz resaltó la importancia de reconocer el valor esencial de cada persona y trabajar juntos para construir un México donde todas las personas, independientemente de su género, puedan vivir libres de violencia y discriminación.