Atemorizados por la ola de violencia y ante la falta de vigilancia en la zona comercial en el centro de la ciudad, los comerciantes continúa colocando video cámaras de vigilancia e instalando rejas metálicas en los negocios que les permita defenderse del hampa.
Los vecinos de la calle Zaragoza, Rayón, el pasaje peatonal Revolución y otros más, han optado por emplear tecnología y recursos propios que les permita auto vigilarse y hacer lo posible por no ser victimas de los maleantes que roban y extorsionan a los comerciantes.
A decir de uno de los vecinos que optaron por tomas la medida, no queda otro remedio que estar preparados para actuar en contra de los delincuentes que se ocultan en el kiosco del jardín principal, se hacen pasar por indigentes que pernoctan en el citado lugar y durante la madrugada operan abriendo cortinas y puertas de negocios o despechos aprovechando la ausencia de sus moradores.