El gusto y amor por el Karate inculcado en Jesús Manuel Gutiérrez Vargas desde pequeño por su papá, le ha permitido alcanzar a sus diez años de edad la cinta negra 1er Dan por parte del Instituto Nacional de Karate Do Shinbudokan.
Al respecto comenta, “desde pequeño fui agarrando gusto y amor al karate ya que mi papá me metía a entrenar y me invitaba a las exhibiciones, con el paso del tiempo también a los torneos (zic)”.
Jesús Gutiérrez comenzó a practicar el Karate a los tres años de edad gracias a su papá, el Sensei 2do Dan, Héctor Gutiérrez, responsable de Dojo San Roque.
En días pasados, Jesús Gutiérrez realizó su examen de cinta negra 1er Dan, el sinodal fue el Sensei Guillermo Pérez Martínez, quien evaluó los grados a partir del acondicionamiento físico, katas y katas con armas.
Luego de recibir su cinta negra 1er Dan de manos de su propio papá, el nuevo talento salmantino externo, “representa un logro más para mí vida, me motiva a seguir luchando para alcanzar nuevas metas ya que el karate nos impulsa a tener valores y nos enseña a ser personas de bien”.
Por su parte, el Sensei Héctor Gutiérrez señala, “es un orgullo que mi hijo y alumno haya alcanzado su grado de cinta negra 1er Dan y seguir apoyándolo e inculcando la disciplina del Karate a igual que a todos mis alumnos que representan el Dojo Shinbudokan Karate Do San Roque”.