El Rebaño atraviesa una crisis interna, que pese a haber levantado el título de Concacaf, no desapareció y cada vez parece va más en aumento.
Tras la última fecha del Clausura, el DT, Matías Almeyda había pedido públicamente, refuerzos de calidad para poder competir, sin embargo, parece estar sucediendo todo lo contrario. La directiva ha dado luz verde a la salida de varios referentes, situación que incomoda al argentino.
La marcha de Pizarro y la posible salida de Alan Pulido, que aunque parecen ser por motivos económicos y obtener algo de dinero para poder fichar, parece más la represalia de la cúpula rojiblanca, con los autores de las protestas por la falta de primas prometidas hace un año cuando levantaron el doblete.
Todo lo anterior serían motivos suficientes para que Matías de un paso al costado, al ver la falta de apoyo de los de pantalón largo. Además, una oportunidad inmejorable se le puede presentar en los próximos días.
Una vez pasado el Mundial, es casi un hecho de que Juan Carlos Osorio no seguirá más con la selección mexicana, independientemente de lo que suceda en Rusia 2018 y el principal candidato para tomar su lugar es el todavía estratega rojiblanco.
Sus números con Chivas, son su carta de presentación más fuerte. Además de la gran relación que se sabe tiene con los jugadores y el compromiso que ha mostrado y declarado en varias ocasiones con el futbolista mexicano.
Será hasta pasado el draft, que el argentino tome una decisión clara. Lo que es cierto, es que su nombre será mencionado en la próxima reunión de dueños, donde se tocará el tema del Tricolor post Mundial.
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