/ lunes 26 de abril de 2021

Los 8 tipos de parejas tóxicas en el emprendimiento

Comenzar un negocio puede dar miedo y lo normal es que busques un rostro conocido para comenzar, puede ser tu familia, algún amigo o tu pareja.

He recibido muchas consultas sobre cómo lidiar con situaciones que se dan en emprendimientos entre novios o matrimonios. Aquí es importante señalar que los problemas que existan en el negocio son los mismos que ya tiene la pareja pero más notorios.

Incluso, pareciera que algunos emprendedores recurren al “vamos a tener un negocio” para salvar una relación deteriorada y tal como te puedes imaginar, no funciona.

En columnas anteriores hemos hablado de clientes nocivos y de la importancia de los valores para elegir socios, en esta, hablaremos de las parejas tóxicas en el emprendimiento.

Como siempre, esta columna los invita a pedir apoyo de un especialista en salud mental para resolver las situaciones que trascienden el ámbito de los negocios y lesionan lo emocional.

La siguiente lista se genera de las propias anécdotas de mis clientes y de casos de estudio:\u0009

    \u0009
  1. Mejor \u0009no me apoyes. A veces, solo un miembro de la pareja desea emprender \u0009y el otro se mantiene al margen, pero en ocasiones, opina de forma \u0009destructiva y pesimista. Básicamente se dedica a desanimar a la \u0009otra persona.

Frases: No vas a poder, está complicado, no sabes, etc. OJO: Está persona más que ser realista, busca desanimar a su pareja mientras le baja la autoestima.

    \u0009
  1. Cuando \u0009no ayuda, pero sí estorba. Ocasionalmente se involucra en el \u0009emprendimiento, y lo hace mal: compra el insumo equivocado, se le \u0009olvida recoger algo, no da los recados, trata mal a los clientes, \u0009etc. \u0009

Básicamente, no toma en serio el proyecto y genera muchos conflictos.

    \u0009
  1. 1000% \u0009list@. Solo su opinión cuenta en el proyecto, porque se siente la \u0009parte inteligente del equipo. Su pareja parece más secretaria o \u0009asistente, es decir, tiene que obedecer porque su voz es ignorada. \u0009

Todo se basa en acuerdos previos y roles establecidos. Si al inicio se habló de que ambos tendrían un papel relevante en el proyecto, se debe respetar.

Incluso, si uno tiene experiencia y el otro no, es buen momento para que enseñar y empoderar a la otra persona.

    \u0009
  1. Perfeccionista. \u0009Quiere todo a su modo y además, a la primera. En ocasiones, ni \u0009siquiera sabe cómo hacerle, pero se enoja cuando salen las cosas \u0009mal. Además, es altamente probable que tenga reacciones fuertes \u0009ante la frustración porque no sabe manejarla.

En el emprendimiento hay muchos errores y equivocaciones, es imposible que salga perfecto. Si tú o tu pareja no toleran equivocarse, aléjense de emprender.

    \u0009
  1. Mal \u0009y de malas. Se la pasa reclamando y echando en cara su apoyo. Es \u0009decir, hace las cosas, pero de mala forma y resaltando su ayuda al \u0009proyecto, aunque haga cosas muy básicas como atender una llamada o \u0009abrir la puerta.

La idea de ayudar es precisamente hacerlo de buena gana, sin reclamos. De otro modo, lo que se busca es cobrar el favor más adelante.

    \u0009
  1. Soñando \u0009ando. Uno de los dos es la parte positiva, quien que todo ve fácil \u0009y sencillo. Ignora los obstáculos del camino. Pide préstamos sin \u0009consultar a la pareja, se compromete con terceros y toma riesgos \u0009pensando que todo saldrá bien. \u0009

Todo emprendedor por definición es positivo, pero ten siempre un pie en la tierra y sé realista. Aunque la actitud ayuda mucho, la metodología para hacer funcionar un negocio, es muy importante.

Además, es indispensable tomar en cuenta a la otra parte para que sepa de los riesgos de las decisiones importantes.

    \u0009
  1. El/La \u0009“peros”. Muchas veces le toca poner la dosis de realidad al \u0009soñador de la pareja, ya que trata de ser la parte que aterrizar al \u0009soñador.

Si le pone “pero” a todo, quizá es temor disfrazado de análisis. La diferencia con el 1. es que no desea que el proyecto fracase, solo tiene miedo al riesgo.

    \u0009
  1. Ley \u0009del hielo. Hace a la pareja a un lado del proyecto de formas \u0009hirientes. Le dice que no sirve para nada, que no le ayuda, que sus \u0009ideas son malas, que no comprende el negocio y le va excluyendo del \u0009emprendimiento. \u0009

Es decir, abiertamente agrede verbalmente a la otra parte y le hace sentir que no aporta nada.

Lo curioso es que normalmente la parte agredida es quien puso el dinero, esfuerzo y/o contactos para crear el negocio y ahora le hace a un lado.

Y así llegamos a la conclusión. Considera si estás o podrías estar en la lista.

Medita si tienes la madurez emocional suficiente para continuar con algo que los lastimará. Y, sobre todo, ten los ojos abiertos, a señales de abuso o maltrato.

Recuerda: “SI fuera fácil, cualquiera lo haría bien”\u0009


Comenzar un negocio puede dar miedo y lo normal es que busques un rostro conocido para comenzar, puede ser tu familia, algún amigo o tu pareja.

He recibido muchas consultas sobre cómo lidiar con situaciones que se dan en emprendimientos entre novios o matrimonios. Aquí es importante señalar que los problemas que existan en el negocio son los mismos que ya tiene la pareja pero más notorios.

Incluso, pareciera que algunos emprendedores recurren al “vamos a tener un negocio” para salvar una relación deteriorada y tal como te puedes imaginar, no funciona.

En columnas anteriores hemos hablado de clientes nocivos y de la importancia de los valores para elegir socios, en esta, hablaremos de las parejas tóxicas en el emprendimiento.

Como siempre, esta columna los invita a pedir apoyo de un especialista en salud mental para resolver las situaciones que trascienden el ámbito de los negocios y lesionan lo emocional.

La siguiente lista se genera de las propias anécdotas de mis clientes y de casos de estudio:\u0009

    \u0009
  1. Mejor \u0009no me apoyes. A veces, solo un miembro de la pareja desea emprender \u0009y el otro se mantiene al margen, pero en ocasiones, opina de forma \u0009destructiva y pesimista. Básicamente se dedica a desanimar a la \u0009otra persona.

Frases: No vas a poder, está complicado, no sabes, etc. OJO: Está persona más que ser realista, busca desanimar a su pareja mientras le baja la autoestima.

    \u0009
  1. Cuando \u0009no ayuda, pero sí estorba. Ocasionalmente se involucra en el \u0009emprendimiento, y lo hace mal: compra el insumo equivocado, se le \u0009olvida recoger algo, no da los recados, trata mal a los clientes, \u0009etc. \u0009

Básicamente, no toma en serio el proyecto y genera muchos conflictos.

    \u0009
  1. 1000% \u0009list@. Solo su opinión cuenta en el proyecto, porque se siente la \u0009parte inteligente del equipo. Su pareja parece más secretaria o \u0009asistente, es decir, tiene que obedecer porque su voz es ignorada. \u0009

Todo se basa en acuerdos previos y roles establecidos. Si al inicio se habló de que ambos tendrían un papel relevante en el proyecto, se debe respetar.

Incluso, si uno tiene experiencia y el otro no, es buen momento para que enseñar y empoderar a la otra persona.

    \u0009
  1. Perfeccionista. \u0009Quiere todo a su modo y además, a la primera. En ocasiones, ni \u0009siquiera sabe cómo hacerle, pero se enoja cuando salen las cosas \u0009mal. Además, es altamente probable que tenga reacciones fuertes \u0009ante la frustración porque no sabe manejarla.

En el emprendimiento hay muchos errores y equivocaciones, es imposible que salga perfecto. Si tú o tu pareja no toleran equivocarse, aléjense de emprender.

    \u0009
  1. Mal \u0009y de malas. Se la pasa reclamando y echando en cara su apoyo. Es \u0009decir, hace las cosas, pero de mala forma y resaltando su ayuda al \u0009proyecto, aunque haga cosas muy básicas como atender una llamada o \u0009abrir la puerta.

La idea de ayudar es precisamente hacerlo de buena gana, sin reclamos. De otro modo, lo que se busca es cobrar el favor más adelante.

    \u0009
  1. Soñando \u0009ando. Uno de los dos es la parte positiva, quien que todo ve fácil \u0009y sencillo. Ignora los obstáculos del camino. Pide préstamos sin \u0009consultar a la pareja, se compromete con terceros y toma riesgos \u0009pensando que todo saldrá bien. \u0009

Todo emprendedor por definición es positivo, pero ten siempre un pie en la tierra y sé realista. Aunque la actitud ayuda mucho, la metodología para hacer funcionar un negocio, es muy importante.

Además, es indispensable tomar en cuenta a la otra parte para que sepa de los riesgos de las decisiones importantes.

    \u0009
  1. El/La \u0009“peros”. Muchas veces le toca poner la dosis de realidad al \u0009soñador de la pareja, ya que trata de ser la parte que aterrizar al \u0009soñador.

Si le pone “pero” a todo, quizá es temor disfrazado de análisis. La diferencia con el 1. es que no desea que el proyecto fracase, solo tiene miedo al riesgo.

    \u0009
  1. Ley \u0009del hielo. Hace a la pareja a un lado del proyecto de formas \u0009hirientes. Le dice que no sirve para nada, que no le ayuda, que sus \u0009ideas son malas, que no comprende el negocio y le va excluyendo del \u0009emprendimiento. \u0009

Es decir, abiertamente agrede verbalmente a la otra parte y le hace sentir que no aporta nada.

Lo curioso es que normalmente la parte agredida es quien puso el dinero, esfuerzo y/o contactos para crear el negocio y ahora le hace a un lado.

Y así llegamos a la conclusión. Considera si estás o podrías estar en la lista.

Medita si tienes la madurez emocional suficiente para continuar con algo que los lastimará. Y, sobre todo, ten los ojos abiertos, a señales de abuso o maltrato.

Recuerda: “SI fuera fácil, cualquiera lo haría bien”\u0009