/ sábado 23 de julio de 2022

Empresas fantasmas espantan el “sueño americano” de miles de mexicanos

Según la Secretaría de Relaciones Exteriores, del 2009 al 2021: 4,443 mexicanos han fallecido al intentar cruzar la frontera con Estados Unidos. Tan sólo en el 2021 se contabilizaron 719 muertes de connacionales. Estas tragedias no son los únicos fantasmas que destruyen el “sueño americano” de los mexicanos. Cuando sus tres hijos le dieron la buena noticia a Don Antonio no pudo evitar tener fe en que las cosas por fin mejorarían. “¡Nos vamos a Canadá! Ya está todo listo”, le dijeron. Don Antonio apenas podía creerlo, y más aún cuando les costaría sólo seis mil pesos por persona irse con los papeles arreglados a un trabajo temporal que les ayudaría a salir adelante -- así de rápido y así de fácil. Hoy, Don Antonio, originario de Abasolo, Guanajuato, y sus tres hijos han sido defraudados. Han perdido dinero y parte de su fe. Ahora, la rabia por ser víctimas de personas sin escrúpulos y la necesidad de reponerse, son las únicas motivaciones que tienen para volver a empezar y soñar.

La búsqueda de trabajo en el extranjero ha evolucionado por distintos fenómenos como la pandemia del Covid-19, por ejemplo. Muchas personas se quedaron sin empleo como parte de los estragos de esta crisis sanitaria y, ante esta situación, se ha dado una proliferación de alternativas de trabajo en distintos países que no se veía antes. Basta con entrar al Internet y podremos encontrar ofertas muy atractivas a primera vista para migrar a Canadá, Estados Unidos e, incluso, a Europa. No obstante, muchas de estas opciones de trabajo pueden ser falsas y, en lugar de ayudar a salir del mal momento a quienes se interesan en aplicar para alguna de ellas, los termina dejando en una situación mucho peor.

Casos como el de Don Antonio son una mina de oro para falsos reclutadores que se aprovechan de la necesidad de estas personas que desean salir adelante. El Centro de los Derechos del Migrante (CDM) ha documentado que, en promedio, cada persona defraudada en México pagó 9,300 pesos, por lo que estas empresas fantasmas se han embolsado más de 60 millones de pesos. Estos grupos de reclutadores tienen distintas formas de operar, van desde las publicaciones en medios tradicionales como periódicos hasta la difusión de sus ofertas a través de las redes sociales. No obstante, los casos de mayor impacto se registran cuando organizan reuniones en comunidades pequeñas para hablarles de las grandes oportunidades existentes sobre todo en Estados Unidos, y a las cuales pueden aplicar con cuotas accesibles. El resultado es devastador, ya que la mayoría de los residentes en edad de trabajar apuestan sus únicos ahorros o se endeudan para ser parte del proceso de selección.

Ahora bien, para enfrentar este tipo de situaciones es importante ponernos en contexto sobre la manera correcta para la contratación en el extranjero. Por ejemplo, en Estados Unidos cada año miles de personas trabajan como parte de los programas de visas H-2A y H-2B en empleos temporales en industrias como la agricultura, jardinería, reforestación, procesamiento de alimentos, entro otras. El gobierno estadounidense es quien autoriza estos empleos a petición de las empresas, las cuales deben cumplir con una serie de requisitos, incluida una certificación de trabajo temporal. En otras palabras, si alguien ofrece trabajo en Estados Unidos, antes debe haber cumplido con un riguroso proceso.

En el caso de Guanajuato, a través de la Secretaría del Migrante y Enlace Internacional prevenimos estas acciones ilícitas brindando asesoría a las personas que desean saber sobre la veracidad de ofertas de empleo en el extranjero, investigando a las supuestas empresas para verificar si son reales. Así mismo, año con año llevamos a cabo campañas de prevención en las que alertamos a la ciudadanía sobre estas falsas oportunidades laborales. En dicha estrategia damos recomendaciones como: en ninguna circunstancia pagar para asegurar un empleo en el extranjero ni para realizar trámites; además, solicitar al reclutador información concreta de la empresa contratante como dirección, teléfonos, página web y redes sociales.

La migración ordenada y normalizada es a lo que se aspira en todo el mundo, ya que la movilización de personas en busca de otras alternativas de desarrollo es un derecho e, incluso, una necesidad social y económica, como lo dicta el Pacto Mundial para una Migración Segura, Ordenada y Regular que impulsa las Naciones Unidas. Muchos países requieren del talento, experiencia, conocimientos y, sobre todo, las ganas de salir adelante de personas que, como Don Antonio y sus hijos, están en búsqueda de una legítima oportunidad. En artículos anteriores el llamado era “Piénsalo bien, no te arriesgues” a irte de indocumentado y sufrir una tragedia. Ahora debemos ahuyentar otros fantasmas que desean arrebatar no sólo dinero sino el sueño de trascender. Por eso, escucha el mensaje de miles como Don Antonio: ¡Infórmate bien, no caigas en fraudes!

Según la Secretaría de Relaciones Exteriores, del 2009 al 2021: 4,443 mexicanos han fallecido al intentar cruzar la frontera con Estados Unidos. Tan sólo en el 2021 se contabilizaron 719 muertes de connacionales. Estas tragedias no son los únicos fantasmas que destruyen el “sueño americano” de los mexicanos. Cuando sus tres hijos le dieron la buena noticia a Don Antonio no pudo evitar tener fe en que las cosas por fin mejorarían. “¡Nos vamos a Canadá! Ya está todo listo”, le dijeron. Don Antonio apenas podía creerlo, y más aún cuando les costaría sólo seis mil pesos por persona irse con los papeles arreglados a un trabajo temporal que les ayudaría a salir adelante -- así de rápido y así de fácil. Hoy, Don Antonio, originario de Abasolo, Guanajuato, y sus tres hijos han sido defraudados. Han perdido dinero y parte de su fe. Ahora, la rabia por ser víctimas de personas sin escrúpulos y la necesidad de reponerse, son las únicas motivaciones que tienen para volver a empezar y soñar.

La búsqueda de trabajo en el extranjero ha evolucionado por distintos fenómenos como la pandemia del Covid-19, por ejemplo. Muchas personas se quedaron sin empleo como parte de los estragos de esta crisis sanitaria y, ante esta situación, se ha dado una proliferación de alternativas de trabajo en distintos países que no se veía antes. Basta con entrar al Internet y podremos encontrar ofertas muy atractivas a primera vista para migrar a Canadá, Estados Unidos e, incluso, a Europa. No obstante, muchas de estas opciones de trabajo pueden ser falsas y, en lugar de ayudar a salir del mal momento a quienes se interesan en aplicar para alguna de ellas, los termina dejando en una situación mucho peor.

Casos como el de Don Antonio son una mina de oro para falsos reclutadores que se aprovechan de la necesidad de estas personas que desean salir adelante. El Centro de los Derechos del Migrante (CDM) ha documentado que, en promedio, cada persona defraudada en México pagó 9,300 pesos, por lo que estas empresas fantasmas se han embolsado más de 60 millones de pesos. Estos grupos de reclutadores tienen distintas formas de operar, van desde las publicaciones en medios tradicionales como periódicos hasta la difusión de sus ofertas a través de las redes sociales. No obstante, los casos de mayor impacto se registran cuando organizan reuniones en comunidades pequeñas para hablarles de las grandes oportunidades existentes sobre todo en Estados Unidos, y a las cuales pueden aplicar con cuotas accesibles. El resultado es devastador, ya que la mayoría de los residentes en edad de trabajar apuestan sus únicos ahorros o se endeudan para ser parte del proceso de selección.

Ahora bien, para enfrentar este tipo de situaciones es importante ponernos en contexto sobre la manera correcta para la contratación en el extranjero. Por ejemplo, en Estados Unidos cada año miles de personas trabajan como parte de los programas de visas H-2A y H-2B en empleos temporales en industrias como la agricultura, jardinería, reforestación, procesamiento de alimentos, entro otras. El gobierno estadounidense es quien autoriza estos empleos a petición de las empresas, las cuales deben cumplir con una serie de requisitos, incluida una certificación de trabajo temporal. En otras palabras, si alguien ofrece trabajo en Estados Unidos, antes debe haber cumplido con un riguroso proceso.

En el caso de Guanajuato, a través de la Secretaría del Migrante y Enlace Internacional prevenimos estas acciones ilícitas brindando asesoría a las personas que desean saber sobre la veracidad de ofertas de empleo en el extranjero, investigando a las supuestas empresas para verificar si son reales. Así mismo, año con año llevamos a cabo campañas de prevención en las que alertamos a la ciudadanía sobre estas falsas oportunidades laborales. En dicha estrategia damos recomendaciones como: en ninguna circunstancia pagar para asegurar un empleo en el extranjero ni para realizar trámites; además, solicitar al reclutador información concreta de la empresa contratante como dirección, teléfonos, página web y redes sociales.

La migración ordenada y normalizada es a lo que se aspira en todo el mundo, ya que la movilización de personas en busca de otras alternativas de desarrollo es un derecho e, incluso, una necesidad social y económica, como lo dicta el Pacto Mundial para una Migración Segura, Ordenada y Regular que impulsa las Naciones Unidas. Muchos países requieren del talento, experiencia, conocimientos y, sobre todo, las ganas de salir adelante de personas que, como Don Antonio y sus hijos, están en búsqueda de una legítima oportunidad. En artículos anteriores el llamado era “Piénsalo bien, no te arriesgues” a irte de indocumentado y sufrir una tragedia. Ahora debemos ahuyentar otros fantasmas que desean arrebatar no sólo dinero sino el sueño de trascender. Por eso, escucha el mensaje de miles como Don Antonio: ¡Infórmate bien, no caigas en fraudes!